jueves, 15 de mayo de 2014

Rare

En esto que de repente le gustas a un amigo, pero no ha cualquier amigo, si no al que podría ser tu hermano. Estas dolida... o más bien dolida no, más bien triste aún piensas en él.
Pruebas, ¿Por qué no? pero no dejas de pensar en él, en lo que a él le gustaba, en lo que él te decía. Y de repente te das cuenta que es la misma situación solo que sabes que tu amigo va a volver si o si... en dos días escuchas todo lo que quisiste que él te dijera, las promesas que quisiste escuchar, pero por suerte o por desgracia salen de otros labios.
Aún estoy confusa, ¿así de repente? ¿qué a mi me gustaba? La verdad es que ni me fijé en mi amigo, y ahora se ha ido pero no experimento la misma sensación de querer volver a velo, abrazarle, besarle,... como la tengo (porque aún sigue) con él, porque muchas cosas me recuerdan a él y no me dejan dar todo con mi amigo porque además no se merece tratarle como lo hicieron conmigo.
Puede que como siempre me haya dejado llevar, pero ahora sé que hacer si esto va a más y veo que no consigo olvidarle porque además a él ya si le importé en algún momento ya no. Igualmente no contamos nada, por nuestra situación así como solo se lo puedo contar a una persona cercana si no quiero consecuencias...

No hay comentarios:

Publicar un comentario